Pasamos a las palabras mayores, sin salir de la discusión y tras el pertinente receso, os recomendamos un paseo por New Jersey con uno de los grandes atractivos de la letra pequeña del festival de este año: Titus Andronicus
Con el prime time volvemos a Inglaterra. Conociendo a Thom Yorke y los Greenwood imaginamos que sonarán muchos temas de su último álbum “a moon shaped pool”, pero bueno, siempre es un placer ver a Radiohead en directo y si, ya, es la primera vez, podéis flipar con la atmósfera que estos tíos crean en sus espectáculos.
La putada de los solapamientos de horarios es que te acabas perdiendo demasiadas cosas. Pero, también, tiene un lado bueno, que es poder ver a grupos que han marcado tu adolescencia, como Dinosaur jr, más cerca de lo que jamás imaginaste. Podríais optar también por Jay Rock o Shellac o Tortoise que tocan, más o menos a la misma hora, pero si elegimos nosotr@s nos quedamos con estos viejos rockeros de Massachusets.
Sin salir de los ritmos guitarreros, nos quedamos con uno de los grandes discazos del año pasado, el “High” de Headache. Si vais huyendo de la monotonía, este es vuestro concierto.
Ahora vamos a meternos en la piel de esos gilipollas que van a los conciertos a tocar las pelotas hablando mientras el grupo toca, o forman una avalancha cuando suenan los acordes de la única canción del grupo que se saben. No es que “standing next to me” sea la única canción que nos gusta de The Last shadow puppets, pero ¡Dios! es la felicidad hecha música, por lo que no nos hacemos responsables de nuestros actos cuando suene. Y de regalo, “bad habbits” y canciones de ese último disco llamado “everything you´ve come to expect” que, la verdad, no está nada mal
Y, por último, si os gusta eso de que os canten nanas antes de dormir no vais a encontrar una mejor manera de acabar el día que viajando a Baltimore con las notas de las canciones “enternecehipsters” de Beach House. Para nosotr@s “myth” es una de las mejores canciones que se han escrito nunca, así que aunque sólo sea por escucharla y flotar, merece la pena aguantar despiert@s hasta las 3.00.
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